A todos los que nos encanta la publicidad, comprendemos que en la vida real es un reto lograr los objetivos que se establecen al implementarla, se necesita mucha creatividad, una excelente planeación y en ocasiones mucha plata poder desarrollar una campaña publicitaria exitosa.
El tema a tocar en esta publicación es la famoso comercial publicitario de Apple del año 1984, el comercial del que hablaremos un poco es el uno de los más comentados y recordados de entre todos los comerciales que se han hecho, esto es motivo suficiente para terminar de leer esta publicación y para dar un vistazo al comercial.
El anunciante fue Apple, el producto su nueva Macintosh y el cliente (la persona que manejaba la responsabilidad de la publicidad y la toma de decisiones) Steve Jobs, director general y cofundador de Apple, que quería un anuncio “trueno”. La agencia fue Chiat/Day con sede en California. El medio fue el Súper Tazón de televisión. El proveedor fue el legendario director de cine británico Ridley Scott de las famosas Alien y Blade Runner. El público fueron 96 millones de personas que veían el Súper Tazón XVIII en ese día de enero de 1984, y la audiencia meta fueron todos aquellos de la audiencia que intentaban decidir si debían comprar una computadora personal Es un principio básico de la publicidad: la combinación del producto correcto en el momento justo en el lugar adecuado, con la participación de las personas correctas, podría crear algo mágico (el trueno de Jobs). En este caso también se requirió un reparto de 200 personas y un presupuesto de 900,000 dólares para la producción y de 800,000 dólares por el espacio de 60 segundos. Así que no fue un pequeño esfuerzo. La historia partió de una novela de ciencia ficción de George Orwell, 1984, acerca del estéril mundo controlado por la mente. Una audiencia de esclavos de piel gris (en realidad “cabezas rapadas” de las calles) observan, en una pantalla gigante, una imagen del Gran Hermano que suelta una diatriba ideológica. Después una joven atlética con pantaloncillos de correr rojos entra corriendo, perseguida por guardias de asalto que llevan cascos, y avienta un mazo a la pantalla. A la destrucción de la imagen le sigue una ráfaga de aire que pasa por encima de los esclavos boquiabiertos mientras éstos “ven la luz”. En la última toma el anunciante lee las únicas palabras del comercial mientras éstas aparecen en la pantalla: “El 24 de enero, Apple Computer introducirá Macintosh. Y verá por qué 1984 no será como 1984.”
En primer lugar, algunos ejecutivos de Apple que vieron por primera vez el comercial quedaron aterrados de que no funcionara porque no se parecía a ningún otro comercial que hubieran visto. Después de verlo, varios miembros del consejo pusieron sus cabezas sobre sus manos. Otro dijo: “¿Quién está a favor de despedir inmediatamente a Chiat/Day?” Supuestamente el otro fundador de Apple, Steve Wozniak, sacó su chequera y le dijo a Jobs: “Yo pago la mitad si tú pagas la otra mitad”. La decisión de transmitir el comercial recayó en Jobs, cuya confianza en el equipo creativo de Chiat/Day le dio el valor de transmitir el anuncio.
El 24 de enero se formaron largas filas afuera de las tiendas de computadoras que vendían la marca Apple y se inicial de 50,000 unidades se sobrepasó fácilmente por las 72,000 unidades que se vendieron en los primeros 100 días y se hubieran vendido más si Apple hubiera podido cumplir con la demanda. El comercial de 1984 es uno de los más comentados y recordados de entre todos los comerciales que se han hecho (lo mejor de la década, los mejores 50 comerciales que se hayan hecho, etc.). Siempre que hay una lista de los mejores comerciales, se encuentra a la cabeza y continúa recibiendo elogios en el siglo XXI.
El comercial sólo se transmitió una vez (de acuerdo, fue un anuncio muy caro en el programa de televisión con la mayor audiencia del año, pero su audiencia meta lo vio solamente una vez). Sin embargo convirtió al Súper Tazón de ser sólo un juego de fútbol americano más, en el evento de publicidad del año. Lo que se sumó a su impacto fue la promoción exagerada antes y después de su transmisión. Las personas supieron acerca del espacio publicitario debido a la cobertura de la prensa antes del partido y lo estaban esperando. Y la cobertura después del juego fue hablar de 1984 como del marcador del partido. La publicidad se volvió noticia y el ver el comercial se convirtió en un evento. Por esa razón el crítico de Advertising Ages, Bob Garfield, lo llama “el mejor comercial de televisión que se haya hecho jamás”. El debate continúa acerca de si el personaje del “Gran Hermano” se diseñó para representar a IBM. ¿Usted qué opina?
Luego del exitoso comercial, la Macintosh estaba listo para su presentación, en esta Steve Jobs tendría su primera gran presentación, no podemos dejar de pasar por alto el vídeo donde se presenta por primera vez al producto que se promovió el mejor comercial de la historia.
Fuente:
Publicidad 7ma edición (William Wells)
No hay comentarios:
Publicar un comentario